Denuncia Tlachinollan la muerte materna de una indígena de Chilapa en campos agrícolas de Sinaloa
Redacción
El Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan denunció la muerte materna de Margarita Bartolo Fermín, una jornalera agrícola originaria de Chilapa en el estado de Sinaloa.
El organismo detalló que el miércoles 21, Margarita Bartolo acudió a la clínica del IMSS de Guasave, Sinaloa, al advertir que tenía un pequeño sangrado. A pesar de que se encontraba a unos días de tener a su cuarta hija, el médico le comentó que no era de cuidado.
Sin embargo, más tarde su esposo Eustaquio Castro la trasladó de urgencia a la misma clínica porque el sangrado era mayor. La metieron al quirófano para operarla, pero no pudieron controlar la hemorragia y la trasladaron al hospital de los Mochis, Sinaloa, para tenerla en terapia intensiva. En la mañana del jueves 22, los médicos le notificaron a Eustaquio que su esposa había muerto.
Margarita salió hace tres años de la comunidad de Xicotlán, municipio de Chilapa, ante la falta de trabajo y la violencia de los grupos de la delincuencia organizada.
El Consejo de Jornaleros Agrícolas de La Montaña, de febrero de 2020 a marzo de este año, registró la salida de 17 mil 775 personas, que se enrolaron como jornaleros agrícolas en los estados de Sinaloa, Chihuahua, Zacatecas, Michoacán y Baja California, principalmente.
Reporta que son 8 mil 768 mujeres y 9 mil 007 hombres de los municipios de Cochoapa el Grande, Tlapa, Metlatónoc, Copanatoyac y Atlamajalcingo del Monte.
En cuanto a su pertenencia a un pueblo indígena el 46 por ciento de las familias es na’savi; el 26 es me’phaa; el 21 nahua y el 7 es población que no se adscribe a un pueblo indígena.
Durante este año, unas 162 personas acudieron al campo agrícola El Gallo, donde murió la indígena Margarita Bartolo Fermín. En ese mismo lugar, el 23 de septiembre de 2014, murió un niño nahua de 2 años, originario de Chiepetepec, municipio de Tlapa, debido a la atención negligente de los médicos de la misma clínica donde fue atendida Margarita.
Los niños y las mujeres indígenas jornaleras son la población más vulnerable, debido a que tiene que sobrevivir en condiciones insalubres dentro de los campos agrícolas, además carecen de servicios médicos, de albergues y de servicios básicos como el agua potable y la luz eléctrica.